-Lo siento Sarah, no tenemos buenas noticias, tienes cáncer en los pulmones... El único tratamiento que te podemos ofrecer es quimioterapia, así mitigaremos el cáncer y tal vez puedas vivir un poco más, sé que esta decisión no es fácil. Pero te pediré el favor como amigo que soy de la familia que consideres esta posibilidad…este cáncer no es operable, está avanzado muy rápido te quedan pocos meses como máximo un mes más.
- No doc.; No quiero pasar el tiempo en el hospital vomitando mis tripas- decía Sarah con lágrimas en los ojos y su voz entre cortada- por favor no cuente esto a nadie, encontraré la manera de hacerlo yo.
Sarah no pudiendo estar más desconcertada parte del hospital hacia su casa a desahogar toda la ira que el médico le había causado.
Llamó a Rob, su mejor amigo desde que estaban en la universidad para una salida casual a su restaurante favorito.
-sé que últimamente hemos estado separados, pero quiero que de verdad sepas que te quiero demasiado- dijo Sarah con la voz casi ahogada por lágrimas próximas a asomarse-.
-Bueno siendo así, y no tienes por qué llorar, Brindo por nosotros, y por nuestra renovada amistad.
-Salud - así juntos tocaron sus copas y se sumergieron no intencionalmente en una velada muy romántica.
- Ya son las 10:00 p.m, hemos estado aquí casi tres horas, deberíamos partir a un lugar más tranquilo para continuar nuestra charla.- Dice Sarah un poco mareada por las copas que se habían tomado. Pagaron la cuenta y despacio fueron caminando y se sentaron en el parque principal de la ciudad.
-Sabes que desde que te conozco he estado enamorado de ti, ¿porque nunca has dejado que pase algo entre nosotros?- pregunta Rob con una vos tímida.
- Si lo sé, pero no quiero perder tu amistad, yo nunca me aburro contigo, eres alguien muy especial para mí, como para dejar que todo lo que hemos construido se valla al caño por una relación que no funcione-. Dice Sarah inconscientemente, negando también que desde hace pocos meses había estado soñando con él todas las noches.
-No te das cuenta de que eso no puede suceder; yo te pertenezco y tú me perteneces, simplemente TE AMO.- Todo a su alrededor desapareció, solo estaban ellos dos habitando en el planeta, solo ellos eran el momento.
- Creo que deberías llevarme a casa, ya es muy tarde-. Casi gritando dijo Sarah borrando así todo el romanticismo que se había creado en la atmosfera.
- Claro que sí, no hay ningún problema. Aseguro Rob con un fuerte desconcierto por la reacción de Sarah.
Cuando llegaron a la casa de Sarah Rob no se pudo tragar más las palabras y por fin le dijo antes de que entrara a la casa.- Quiero que seas mi Valentín este año. Vamos a la fiesta de San Valentín que Mel hará este fin de semana y te prometo que te dejaré en paz.
-Está bien, recógeme a las 8:00 pm estaré lista para la fiesta. Dijo Sarah tratando de ocultar el entusiasmo en su voz.
Toda la semana Sarah no dejo de pensar en la fiesta y en Rob, toda la semana estuvo llena de alegría que hasta el “pequeño” problemita medico pasó a un segundo plano; ese sábado estuvo lista tan rápido que le dio tiempo reflexionar tan sobre su sentimiento hacia Rob y decidió que ese noche iba a ser su primer beso.
Cuando llegó Rob, salieron rumbo a la fiesta donde se encontraron con muchos viejos amigos y conocidos que no tuvieron tiempo de hablar. Cuando se acabó todo y ya Sarah era llevada por Rob a su casa por fin tuvo la valentía de abrir la boca.
-No quiero irme todavía a mi casa, quiero estar más tiempo contigo, llévame a tu casa. Dijo Sarah con una voz muy tímida apenas audible. Y Rob sin decir nada giró y la llevó a su apartamento.
-¿Qué quieres hacer ahora?, ¿quieres un poco de vino?- ofreció amablemente.- Sarah asintió con la cabeza y en pocos segundos ya tenía una copa en sus manos.
-¿Sabes que quiero?, Quiero que me beses, quiero que me hagas el amor.- Expresó Sarah con gran deseo.
- Estas ebria, déjame hacerte la cama, no te dejaré ir a tu casa en ese estado-. Dijo Rob preocupado por la reacción que ella tuvo. Sarah se acercó lentamente hacia sus labios solo dejando pocos centímetros entre ellos y dijo- Tengo cáncer, NO sobreviviré mucho. Solo quiero que esta sea nuestra noche, nuestro momento, quiero amarte como lo he visto en mis sueños-.
- Tienes cáncer?.- Expresó mucha preocupación y se alejó instantáneamente.- ¿Por qué no me lo habías dicho?-
-Apenas me entere la semana pasada y no supe cómo decírtelo, perdón-.
- y así piensas que es la mejor manera?-. Sarah notó un poco de rabia en su vos y viéndolo a los ojos descubrió que le estaba tomando trabajo controlarse.
- No, esta es solo mi forma de decirte que también TE AMO, y que quiero pasar contigo el resto de mis días-. Sumergiéndose en un suave beso pasaron toda la noche juntos.
Tras de pasar la primera noche juntos y así más de tres meses. Rob pensaba todo iba tan bien que ni se acordaba de la enfermedad que durante todo el tiempo juntos Sarah le había confesado pero cuyos síntomas había ocultado hasta que una noche llegó del trabajo y encontró una nota de su amada:
Amor quiero que sepas que si hoy no sobrevivo es porque no me puedo aguantar más el dolor, pero quiero que sepas que fuiste aquel que hizo que mi dolor no fuera tan fuerte. Bendigo el día de san Valentín porque fue el día en que me atreví a decirte todo lo que siento, el día en el que tú y yo fuimos uno y sobre todo mi día favorito. TE AMO CON TODO MI CORAZÓN y recuerda que fui tuya y serás mío hasta el fin de mis días…. Te amo, Sarah.
Rob sabía exactamente donde estaba ella, así que corrió, pero cuando llegó se dio cuenta de que ella yacía en la cama del hospital tan fría y diferente a cuando la había conocido y hay, en ese mismo instante se dio cuenta de que estaba muerta.
